Tantas letras sin sentido;
tantas otras, sentidas.
Tantos ojos que leen;
tantos otros que no miran.
Y están los que observan lo que no interesa a la piel.
Tanto negro pintado de rosa.
Tanto, que dice nada.
Nada, nada es la única meta que nos hemos propuesto,
aún sin reconocerlo.
Sabor a nada, sobre la lengua que no oye nada.
Nada de cuerpo y mente.
Nada de cabeza, y de pies.
Nada de latidos, y de caminar.
Como la nada del primer aliento,
la nada del abrazo final.
Imagen: Canva
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Te invito a ver mi nueva entrada en la web de Submarino de hojalata 🤗✌️🤓
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¡Fantástico poema Judith! Con esos golpes y esa fuerza en Tanto/Tantos/Tantas/ con esa contraposición de Nada, nada es la única meta que nos hemos propuesto/ y ese final brutal: Como la nada del primer aliento,/ la nada del abrazo final. Chapó Judith eres una gran Poeta, me fascinó el poema, muchas gracias por regalarnos estas maravillas. Un abrazo enorme y muchos besitos. 🙂
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¿Cómo que nada? Ahí se está contando mucho y con la sonoridad que le has dado, como dice Rebeca, como si fueran golpes, golpes en la mesa diciendo «se acabó». Tus poemas siempre cuentan mucho y hablan de todo. Fantástico, Jude. 😘
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Pues eso: una nada hecha de mucho☺️👌. Mil gracias por tu lindo comentario 🙌🌹🙏
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Me encantó este poema. Qué fuerza esta nada que dice tanto y transmite tantos emociones y sentimientos.
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Gracias, querida maestra, por dar ‘tanto’ a este pequeño poema🤓☺️📚
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Wow, querida mía, cada vez que te leo estrellitas salen de mis ojos ante tanta belleza en esos versos. Precioso.
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Qué bonitas palabras. Significan tanto, viniendo de una maestra de las letras. Mil millones de gracias, y más 🌹🌹🌹🙌🙌🙌
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