Noches entre vigilias
y sueños,
a un paso entre la luz
y la oscuridad.
Ojos silentes
hinchados de dolor
enmascaran mi otro yo,
escondiendo mis lamentos.
Sonrisa en la que te apoyas
para comenzar el día.
Postura erguida,
Máscara, mi segunda piel.

Solo tú,
soplaste y nació una nueva vida.
Cada hora, minuto y segundo
de tu existencia
me hace caminar día a día;
quedando los lamentos
perdidos, quizás olvidados.
Autora: María José Vicente Rodríguez
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Precioso poema lleno de sentimiento.
Máscaras, siempre máscaras, como esa segunda, tercera, cuarta e incluso primera piel.
👏🏻👏🏻👏🏻👏🏻
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Precioso poema María José cuando lo has recitado hoy, me he quedado con ganas de volver a escucharlo, o leerlo. Así que me has dado una regalo, que bonita la reflexión del dolor que causa a veces la vida, y de cada día, y el símil de la máscara que cubre la luz. Y qué bonita la dedicatoria a la nueva vida, a tú hija, como creo que es el caso. Te felicito, me encanta.
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Así es, mi hija fue el resucitar a una nueva vida, donde el dolor quedó encubierto por las alegrías de estar cada día con ella.
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Muy bonito!
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Qué hermoso, María José. Es que este poema te llega al alma
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Que doloroso!! Que oscuro! Me encanta!
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Muy bonito, la dualidad luz y oscuridad ¡Me gustó muchísimo!
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Simplemente genial. María José Vicente no deja de sorprendernos con la versatilidad y la exquisitez en sus letras. La temática existencialista gótica es una de mis favoritas, así que este poema me ha fascinado de principio a fin. 👏👏👏👏👏👏❤️❤️❤️❤️❤️❤️
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