Como si fuera posible

Como si fuera posible

que mis palabras llegaran a ti

te escribo.

Y en cada línea

poso recuerdos que fueron

y que quisieron ser

pero quedaron suspendidos en el aire.

Sé que son buenos esos recuerdos

porque veo como el viento baila con ellos

y los ofrece a otros cuerpos.

Sé que son buenos esos recuerdos,

porque los árboles se estremecen

cuando los deposita entre sus copas el viento.

Sé que son buenos esos recuerdos

porque el rostro se me ilumina

al recordarlos.            

Como si fuera posible

que mis palabras llegaran a ti

te escribo.

Y en cada línea

poso recuerdos que fueron

y que quisieron ser

pero quedaron suspendidos en el aire.

Sé que aún le preguntas a la luna

con cuál de sus caras contempla de forma plena a nuestro planeta,

si es con la recoge las tristezas de los amantes

o con la que las alimenta.

Sé que aún me observas a escondidas

cuando leo, cuando escribo, cuando tomo un baño

e imagino que las sales y el agua

también recorren tu cuerpo.  

Es entonces cuando mi piel desnuda

y mis labios sedientos

más cerca te sienten

y al mismo tiempo

más padecen tu ausencia.

Sé que aún caminas

por la orilla de la playa

porque siempre imaginábamos

al cielo como un inmenso mar

compuesto por las lágrimas

de quienes tanto echan de menos

a todas las personas que se fueron.

Como si fuera posible

que mis palabras llegaran a ti

y trascendieran de un plano a otro plano,

de la tierra al más allá,

te escribo.

Y en cada línea

poso recuerdos que fueron

y que quisieron ser

pero quedaron suspendidos en el aire.

Sé que aún sonríes

cuando cruzas nuestro puente,

lo sé, porque ya han pasado más de veinte años,

y yo

aún lo hago.

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